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dc.date.accessioned2020-10-02T17:11:03Z
dc.date.available2020-10-02T17:11:03Z
dc.date.issued2020-11
dc.identifier.citationOrozco, Rocio de las Nieves y Rodríguez, Teresa Michelle. (2020). Cultura comunitaria en Jalisco: retos y perspectivas, hacia un modelo de formación integral para agentes socioculturales. Ponencia presentada para el 4to. Encuentro Nacional de Gestión Cultural México. Oaxaca, México.es_MX
dc.identifier.urihttp://observatoriocultural.udgvirtual.udg.mx/repositorio/handle/123456789/1039
dc.description.abstractLa cultura comunitaria como definición atraviesa, al menos en México por un camino nuevo, en donde diversos agentes van incorporándose para entretejerlo y construirlo. Para fines de esta investigación, así como la relación que la autora tiene con la temática, se plantea entender la cultura más allá de la visión idealista y de valor estético del término, para comprenderla como un sistema de prácticas y valores construidos social e históricamente. Desde la visión erudita e idealista, “la cultura son objetos que sólo algunos pueden tener y otros no, unos pueden crear y otros consumir” (Mariscal, 2017, p.13) El problema de esta definición según define Mariscal, y en que la autora de este trabajo coincide, es que el Estado se convierte en el “proveedor, facilitador, garante, etc.,” de llevar la cultura a la mayor población que se pueda, concluyendo de forma arbitraria qué se entiende por cultura, qué no, qué y cómo llevar, qué tiene más valor o significado y qué no. Convirtiendo nuevamente a la comunidad en agentes pasivos o simplemente asistentes o espectadores. Al contar con múltiples definiciones de la cultura de diversos enfoques disciplinares, es común que se generan diversas interpretaciones de las prácticas, los procesos, los estudios, resultando en una falta o vacío teórico desde el cual asumir la práctica, García Clancini (2004) dice al respecto: “La cultura según quienes la hacen o la venden. Tenemos que hacernos cargo no solo de las definiciones múltiples sobre lo cultural dadas por las humanidades y las ciencias sociales, sino también de las conceptualizaciones hechas por los gobiernos, los mercados y los movimientos sociales. Las maneras en que está reorganizándose la producción, la circulación y los consumos de los bienes culturales no son simples operaciones políticas o mercantiles; instauran modos nuevos de entender qué es lo cultural y cuáles son sus desempeños sociales” (p.39). Por lo anterior es de interés de la autora, apostando a que sea interés cada día de más personas, como se percibe, vive y práctica la cultura comunitaria a partir de la definición dada por el gobierno y la política actual, los agentes culturales diversos integrantes que la instituyen. Colectivos, agrupaciones, organizaciones vecinales, que desde hace mucho atrás la significan. La cultura está viva es cambiante y evoluciona porque está ligada intrínsecamente al ser humano y la manera en que los sujetos se relacionan, lo que se entreteje a partir de las relaciones sociales en las sociedades, permean en la identidad, propiciando así, una identidad diversa en cada individuo que sin duda tiene influencia en la cultura, Giménez (2016) menciona “La identidad puede definirse como un proceso subjetivo (y frecuentemente auto reflexivo) por el que sujetos definen su diferencia de otros sujetos (y de su entorno social) mediante la auto asignación de un repertorio de atributos culturales frecuentemente valorizados y relativamente estables en el tiempo” (p.61). El término cultura está ligado a significados positivos, además de las connotaciones que las personas regularmente le proporcionan, se liga cultura a la posibilidad de crear, se confía en que la cultura enriquece, ayuda a entender y simbolizar la vida cotidiana, aproxima a través de diversas representaciones a la vida, la cultura se simboliza como un eje transformador. Vich (2014) define a la cultura: “es un conjunto de prácticas que configuran nuestra vida social a partir de la generación de hábitos y de creencias, de relaciones sociales diversas”. (p.26). Complementando que no solo es lo simbólico, también involucra lo afectivo. Vich (2019) insiste en relacionar la cultura también como una “mala palabra” es donde se debe ampliar y analizar la noción de cultura, se debe apostar por comprender que la cultura son relaciones de poder, la cultura tiene que ver con la manera en que los vínculos sociales se han asentado en una comunidad. Tal como la narco-cultura ha configurado la dinámica cultural de ciertos territorios (sic) “La cultura tiene que ver efectivamente con la hegemonía, y la hegemonía en nuestros países hoy sigue siendo, el machismo, hoy sigue siendo las prácticas autoritarias, hoy sigue siendo la corrupción, hoy sigue siendo la homofobia, hoy sigue siendo la falta de memoria, sigue siendo el individualismo, el consumo frívolo, la reproducción de la justicia social” [audio en podcast] (https://www.ivoox.com/levadura-panel-3-procesos-formacion-audios-mp3_rf_40329961_1.html) Invita a tomar la cultura como vínculos, comprender la cultura a partir de lo cotidiano y cómo a partir de lo cotidiano, se reproduce a partir de la cultura relaciones de poder y desigualdad. Por lo anterior la autora considera necesario, plantear la investigación con elementos que abonen a la construcción de una definición colectiva entre diversos agentes involucrados en la cultura comunitaria en el estado de Jalisco, donde los encuentros y espacios para dialogar, pensar y repensar en la cultura y las estrategias de intervención en el trabajo comunitario, hoy en día son limitados, con la finalidad de contribuir a que los objetivos no solo del programa y política pública que hoy el Estado optó llevar como eje rector a través de la cultura, contribuyendo a generar modelos de formación (capacitación y actualización) que contribuya a lograr los objetivos y acciones ejercidas por diversos agentes tengan a bien cumplir con cada uno de sus fines. La pregunta de investigación parte de los siguientes cuestionamientos: ¿Cuál es la conceptualización de cultura comunitaria en diversos actores involucrados? ¿De qué forma la acción cultural es comunitaria? ¿Cuáles son los fundamentos metodológicos y políticos que sostienen las prácticas comunitarias?, ¿Qué tipo de formación pedagógica poseen estos actores? ¿Qué distingue procesos de gestión cultural comunitaria de otros procesos de gestión?, ¿Cuál es el efecto de un programa de formación a agentes que inciden en sus comunidades de manera independiente? ¿Qué significa pensar lo común desde lo cultural? ¿La pedagogía crítica, la psicología comunitaria y diversas herramientas lúdicas y participativas contribuyen al diseño del programa de formación en gestión sociocultural comunitaria? Lo anterior se resume en al siguiente presenta de investigación. ¿Qué tipo de formación (capacitación y actualización) requieren los diversos agentes para la gestión y autogestión cultural con perspectiva comunitaria? A manera de hipótesis se plantea que: 1.Problematizar la conceptualización, incidencia, ejecución y articulación de las diversas experiencias de cultura comunitaria, aporta diversos insumos a los actores, organizaciones, así como al programa nacional de cultura comunitaria. 2. La reflexión, capacitación y actualización, de los agentes socioculturales comunitario, a partir de una metodología integral de formación favorecen a sus diversas acciones y prácticas sociales a partir del resalte de su cultura. Objetivo general: Contribuir al análisis, conceptualización y problematización de las acciones culturales comunitarias, en perspectiva de visibilizar estrategias de formación a los actores socioculturales en Jalisco. Objetivos específicos: Fortalecer el desarrollo del recurso humano en el ámbito de la gestión cultural comunitaria de los municipios de Guadalajara, El Salto, Tonalá, Tlaquepaque, Zapopan y Tlajomulco. Contribuir a la consolidación de actores a partir del modelo de formación (capacitación y actualización) mediante la reflexión y análisis sobre la cultura comunitaria. Otorgar herramientas técnicas y metodológicas para la gestión cultural comunitaria Contribuir en ampliar la documentación sobre la gestión cultural comunitaria en Jalisco Aportar elementos que contribuyan ciudadana en política cultural. Contribuir a desarrollar el pensamiento crítico de los diversos actores que a mediano y largo plazo se refleje en las comunidades donde inciden. Fuentes Bibliográficas: Obras Ezequiel, A.-E. (1987). La practica de la Animación Sociocultural. Buenos Aires: Hvmanitas.Ezequiel, A.-E. (1989). La animación y los animadores. Madrid: Nercea. Ezequiel, A.-E. (1991). Metodología y práctica de la animación socio cultural. Buenos Aires: Hvmanitas. Geertz, C.(2003). La inerpretación de las culturas. Barcelona: Gedisa Gutiérrez Aguilar, Raquel (2016). ¡A desordenar!: por una historia abierta de la lucha social. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Tinta Limón. Pp. 195-235 Guardiola, P. y Diéguez A. (2000) Voluntariado y acción social. En A.J. Diéguez (ed.), La intervención comunitaria. (pp.135-164). Buenos Aries: Espacio. Jean-Claude, G. (2006). La animacióm en la comunidad. Un modelo de animación socioeducativa. Barcelona: Graó. Llena, A., Parcerisa, A., Úcar. X. (2009) La acción comunitaria. 10 ideas clave. Barcelona: Graó Mass, M. (2006). Gestión cultural, comunicación y desarrollo. México: Intersecciones. Montero, M.(2003). Liderazgo comunitario. En M. Montero (ed.), Teoría y Práctica de la Psicología comunitaria. La tensión entre comunidad y sociedad. (pp.93-117). Argentina: Piados Montero, M.(2003). Liderazgo comunitario. En M. Montero (ed.), Teoría y Práctica de la Psicología comunitaria. La tensión entre comunidad y sociedad. (pp.93-117). Argentina: Piados. Moreno González, A. (2013). La Cultura como Agente de Cambio Social en el Desarrollo Comunitario. Arte, Individuo y Sociedad, 25 (1), 95-110. Ranciere, Jaques (2010). El espectador emancipado. Castellón: Ellago Ediciones. Pp. 7-27 Freire, Paulo (200). Cartas a quien pretende enseñar. Buenos Aires: Siglo Veintiuno Editores. Octava carta. Pp. 115-122 V., M. F. (2003). Programas de animación sociocultural.Tres instrumentos para su diseño y evaluación. Madrid: Narcea. Skliar, Carlos (2018). ¿Se puede enseñar a vivir? La educación como comunidad y conversación. Montevideo: Camus Ediciones. Cap I y II Torres, A. (2007). Construir ciudadanía desde la acción colectiva. Las organizaciones populares frente a la descentralización en Bogotá. En. E. González (ed.), Ciudadanía y Cultura. (pp.241-287) Colombia: Lemoine Vich, V. (2014). Desculturalizar la cultura. La gestión cultural como acción política. Siglo Veintiuno Yúdice. G (2002). El recurso de la cultura. Barcelona: Gedisa Sitio e institucioneses_MX
dc.language.isoeses_MX
dc.publisher4to. Encuentro Nacional de Gestión Cultural Méxicoes_MX
dc.publisher4to. Encuentro Nacional de Gestión Cultural Méxicoes_MX
dc.publisher4to. Encuentro Nacional de Gestión Cultural Méxicoes_MX
dc.subjectcultura comunitaria, agentes culturales, sistema de prácticas, construcción sociales_MX
dc.titleCultura comunitaria en Jalisco: retos y perspectivas, hacia un modelo de formación integral para agentes socioculturales.es_MX
dc.typePonenciaes_MX
dc.countrymxes_MX
dc.publication.typeMemoria de congresoses_MX
dc.publication.magazineDe divulgaciónes_MX


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